sábado, 17 de noviembre de 2012

No interpretes los actos de un hombre.

   Por muchas formas en la que miremos las situaciones que se nos presenta con esa persona que nos gusta, estamos conociendo o tenemos una relación con ella, finalmente todo es una interpretación nuestra. Y por ello quizás nos frustramos más de lo normal o esperamos cosas que no necesariamente tienen porque pasar.
   Unos de los errores más comunes que cometemos cuando estamos conociendo a alguien es interpretar cada gesto, palabra o silencio que haga… y de ahí inmediatamente suponemos lo que él está sintiendo hacia nosotras. Este es un error que lo cometemos en cualquier momento de la relación, tanto cuando te gusta alguien, cuando empiezas a quedar con ella o ya tienes una relación de pareja. Siempre estamos interpretando sus miradas, la forma de tocarte, lo que dice… todo lo que hace y no hace. Nos pasamos la mayor parte del tiempo pensando en esta persona, en lo que sentirá, si le gustas mucho o poco, estamos interpretando constantemente.
   Cuando tenemos una cita la gran parte del tiempo la pasamos muy atentas a su actitud, y eso está bien cuando sea para valorar a esa persona como persona y no para suponer que todo lo hace es porque le gustamos mucho o quiere algo más con nosotras. Después de la cita llegas a casa y analizas algo entusiasmada como ha ido este encuentro: lo que podía significar que te tocara el brazo un par de veces, estuviera pendiente de tu bebida o te giñara. Y una vez  analizada la situación llamas a tu amiga para que te ayude a seguir interpretando.
  El interpretar sus actos no significa que tú estés interpretando correctamente los motivos de tal actitud que está teniendo esta persona, lo que puede dar lugar a muchas confusiones que solamente tú las estas creando. Por lo que luego todo se complicará más al no tener los resultados esperados por dicha interpretación.
   Os voy a poner un ejemplo: tienes otra cita con el hombre que has empezado a conocer. Pasas una noche estupenda y te quedas a dormir en su casa. Antes de dormir te dice que dormirá dándote la espalda porque le duele el hombro, pero se arrima a ti hasta que su espalda toca tu pecho, que bonito, ¿no? Quiere sentirte mientras duerme y encima te ha dado una explicación de por qué dormiría dándote la espalda… que atento.
   Al día siguiente él se gira hacia ti, apoya su frente con la tuya, te mira a los ojos y te dice “buenos días” con una sonrisa. Ainsss… aquí está pasando algo ¿verdad? No puede ser más bonito! Puede que este comenzando a sentir algo más por ti.
  Cuando llegas a  casa comienzas a pensar en cómo ha sido todo… se lo cuentas a tu amiga y ella lo ve igual de bonito que tú, así que no nos podemos estar equivocando.
   Pero los días pasan…las semanas… y él no te ha llamado, ni escrito aun… y ahora empiezas a sentirte mal, triste y quizás un poco desilusionada, te preguntas que ha podido pasar si te dio señales de que siente algo por ti.
   Te diré que ha pasado: has interpretado demasiado unos actos muy simples. Por eso ahora te sientes así. Cuando él te dijo que se acostaba hacia ese lado y te explicaba sus motivos, automáticamente pensaste que se estaba involucrando contigo y no quería que te sintieras mal, cuando simplemente te comento algo que es lo que realmente estaba pasando “me duele el hombro”, pues los hombres también sienten la necesidad de expresarse. Y el que se pegara a ti no era por otro motivo más que porque estaba al filo de la cama y tú en medio.
   Al  día siguiente se gira hacia ti, junta su frente a la tuya y de dice “buenos días” a lo que tú piensas que esto es señal de que siente algo por ti, pues ha sido un despertar precioso. Pero la realidad es otra, simplemente se giro y tú estabas cerca, dudo mucho que fuera buscando poner su frente junto la tuya…
   Las mujeres tenemos tendencia a interpretarlo todo románticamente y lleno de significado… y de este modo empiezas a esperar unos resultados acorde a tus interpretaciones. Por lo tanto no interpretes demasiado, pues a causa de esas interpretaciones acabaras esperando unos resultados que posiblemente no vengan como esperabas y acabaras decepcionada.
   En este caso que hemos puesto como ejemplo; si esperas que él te llame por tus interpretaciones del último encuentro, posiblemente te lleves una desilusión. Pues lo que para ti fue un encuentro lleno de mensajes de que él siente algo por ti, para él no tiene porque ser de esta manera… ¿Ahora qué pasa? Que la que se siente mal eres tú, porque esperabas unos resultados según tus interpretaciones.
   Si en vez de haberlo interpretado y lo hubieras dejado fluir, posiblemente ahora estarías mejor. Posiblemente no hubieras contado con su llamada o con que él tenía sentimientos hacia ti… ahora serias más libre a lo que viniera más adelante.
  Así que no interpretes tanto, pues tú no sabes lo que para él significa ciertos actos. Deja que todo fluya.